Juan se siente el hombre con más suerte del mundo aunque, a fin de cuentas, esto sólo responde a su interpretación de los hechos.
Lo que percibimos, la forma en la que analizamos e interpretamos lo que nos pasa, depende en gran medida del espíritu que hayamos cultivado a lo largo de nuestra vida.
Si nos hemos concentrado en ser optimistas, en disfrutar todo lo que podamos y aprovechar los regalos que el mundo tiene para ofrecernos, podremos encontrar el lado bueno de todas las situaciones, ser agradecidos y sentirnos maravillados ante los azares del destino.
Esto es lo que caracteriza a las personas que tienen buena suerte. Verás que la vida no se trata tanto de tener buena suerte sino de experimentar como verdadera suerte el hecho de estar vivos.