¿Cómo se cocina un libro? No es sencillo: la mayoría se hace tomando por asalto las cocinas de los amigos o entrando a saco en los baúles de los abuelos. Se mezclan bien, se distribuyen en el mismo sentido que las cartas de los trasatlánticos hecho lo cual se adornan las entradas de capítulo con viñetas ensortijadas, se espolvorea todo con algún prologuillo afanoso y ligero y se sirve casa a casa, ya que un libro semejante no se consigue en librerías. Gusto de los libreros.