Propone una reflexión a través de la chanza y la broma acerca del sexo, la justicia y las relaciones de pareja. De este modo presenta a cuatro parejas que exponen ante el Juez las situaciones de infelicidad de sus vidas, esperando que éste las resuelva. El Juez motiva sus sentencias, mostrándose como excelente "aplazador" de los problemas.